Como es tradición, al inicio del mes de septiembre, la sede del Obispado de Cádiz y Ceuta, el pasado viernes acogió el juramento y la toma de posesión de seis sacerdotes como párrocos de sus nuevos destinos.
El obispo diocesano, Mons. Rafael Zornoza Boy, que ha presidido la ceremonia, acompañado del Vicario General y el Canciller de la diócesis, ha recordado la importancia del rito de toma de posesión litúrgica en las parroquias, un acto que se irá llevando a cabo en cada una de ellas en las próximas semanas.
Posteriormente, el obispo diocesano ha querido trasladar a los nuevos párrocos algunas de sus inquietudes y los objetivos que hay marcados para este nuevo curso pastoral. Entre ellas D. Rafael ha insistido mucho, en relación al ministerio, en la necesidad de la confraternización y la comunión, representada en las reuniones y en las jornadas de formación del clero. “En un mundo marcado por el individualismo corremos el riesgo de aislarnos. Es por ello que os invito como párrocos a ser muy fieles en la vida común”.
Por otro lado, ahora que los párrocos van a llegar a una nueva parroquia, el obispo diocesano ha destacado la importancia de hacerla sosegada y progresivamente. “Cada parroquia tiene sus características. Hay que ver al llegar lo que cada momento exige. La caridad, la liturgia y la evangelización son la base de una parroquia”. En este sentido, Mons. Zornoza ha pedido a los párrocos incorporar a los fieles a los momentos de reflexión sobre la evangelización y en las experiencias que la diócesis desarrolla en este campo. Igualmente, ha invitado a utilizar el apoyo de las distintas delegaciones y a seguir el Plan Pastoral, que está vigente hasta finales del 2025.
Un aspecto al que el prelado ha dado mucha importancia ha sido el de la administración y la gestión económica y legal de las parroquias para evitar cualquier problema que pueda repercutir tanto en la persona del párroco como de la diócesis. “En cuanto a lo administrativo, el cura-párroco tiene una labor administrativa que no tienen otros ministerios. Hay una responsabilidad en la administración”.
Así, antes del acto de juramento y profesión de fe, la Ecónoma Diocesana, Dña. Carmen Lobato, ha ofrecido a los párrocos una serie de indicaciones referentes a la administración de los templos.
De esta manera, podrán ocupar las parroquias asignadas los siguientes sacerdotes:
Rvdo. D. Stuart Chipolina, Párroco de San Bernardo Abad (Estación de San Roque).
Rvdo. D. Juan Enrique Sánchez Moreno, Párroco de Santiago Apóstol (La Línea de la Concepción).
Rvdo. D. Daniel Robledo Pérez, Párroco de Nuestra Señora de la Palma (Cádiz).
Rvdo. D. Javier Ancizar Montes Murillo, Párroco de Ntra. Sra. de la Inhiesta (Paterna de Rivera).
Rvdo. D. Antonio José Aguilar Verdugo, Párroco de San Juan de Dios (Ceuta).
Rvdo. D. Francisco Jesús Ferrer Serrano, O.SS.T., Párroco de la Santísima Trinidad (Algeciras).
Al acto asistieron también el nuevo administrador parroquial de Nuestra Señora de la Merced (Cádiz), Rvdo. D. Rafael Fernández Aguilar, y el administrador parroquial de Nuestra Señora de Fátima (El Colorado), Rvdo. D. Jerzy Paczuski.
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